Igual vale para coliflor, col, incluso cogollos de lechuga...
Los ingredientes:
- medio kilo de brócoli,
- 4-5 dientes de ajo,
- vinagre de vino de Jerez,
- aceite de oliva y sal.
La preparación:
Lavamos bajo el grifo la verdura, y la separamos en "arbolitos", que queden lo más parecido posible de tamaño. La ponemos en una vaporera (o en un cestillo que encaje sobre una cacerola con dos dedos de agua, sin que el agua toque la verdura) y la cocemos al vapor hasta que esté hecha (aquí depende del gusto de cada uno, si le gusta más o menos blanda. En mi caso me gusta que tenga textura crujiente).
Mientras tanto, pelamos y picamos los ajos lo más pequeño posible. Ponemos 2-3 cucharadas de aceite al fuego, y cuando esté caliente, añadimos los ajos, y los freímos, sin que lleguen a quemarse.
Colocamos el brócoli en una fuente, le ponemos sal y un poco de vinagre, y vertemos por encima el aceite caliente, con los ajos fritos.
Se puede comer tanto frío como caliente. A mi me gusta más el contraste de la verdura fría y el aceite caliente por encima.
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