Una receta más de carne guisada, pero no cualquier receta, para mi, esta es estupenda. Se puede hacer con cualquier carne que nos guste, pero yo suelo elegir la carne que se suele echar al puchero, tipo morcillo, jarrete, etc, que aunque más dura, y necesita más tiempo de cocción, queda tierna y melosa, mucho más rica que otras.
Los ingredientes:
- 500 gr. de magro de cerdo ibérico.
- 2 pimientos rojos.
- 4 zanahorias.
- un tallo de apio.
- aceite de oliva, sal
- una punta de piri-piri o guindilla molida.
La preparación:
Picamos las verduras en tiras o cuadraditos, y las rehogamos en aceite de oliva o de coco. Cuando estén algo blandas, le añadimos la carne troceada, damos unas vueltas, hasta que pierda el color de cruda, y añadimos la especias, si gusta el picante, si no, se puede echar una cucharadita de pimentón dulce, sal y un poquito de agua o caldo de verduras casero.
Dejamos cocer a fuego lento, hasta que la carne esté tierna. En este caso, una hora.
Una opción mucho más adecuada a este tipo de carne es cocerla en olla de cocción lenta, durante 6-7 horas en baja (o 4 horas en alta), pero en ese caso, yo multiplico cantidades, e incluso congelo en porciones.
Me gusta más sin que quede mucho caldo, y acompañar con arroz.
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