Receta. Frijoles caribeños.

  

 Hoy vamos a comer una comida más internacional, por asi decirlo. Ya que no es muy típico de la cocina nuestra el comer frijoles (alubias negras por decirlo de alguna manera), que bastante ya tenemos con nuestras judías blancas, judiones, alubias de la Granja, fabes, alubias pintas............... Pues hoy, más de algo parecido, y buenísimo.

  Este no es uno de los platos más rápidos de cocinar, porque hay que preveer el remojo de la noche anterior de las legumbres, pero una vez puestos manos a la obra, se hace ligerito, y lo mejor es que puedes hacer más cantidad, y congelarlo en porciones. Y te resuelve la comida para varias ocasiones.
 Los ingredientes:

  - Medio kilo de frijoles (judías negras)
  - 3 cebollas
  - 3-4 pimientos.
  - una cabeza de ajos
  - hojas de laurel.
  - orégano y sal
  - vinagre de vino
  - aceite de oliva.

  La preparación:

  Ponemos en una olla (yo uso la olla rápida, que luego tiene sólo 8 minutos de cocción, pero con una olla exprés normal, en media hora también lo resuelves) las legumbres remojadas, 5 dientes de ajo, una cebolla entera, un pimiento entero, 2 hojas de laurel, y lo cubrimos todo de agua. Lo ponemos al fuego y lo dejamos hasta que estén tiernos.

  Mientras tanto, picamos muy pequeñita las otras dos cebollas y los pimientos, y los refreímos en un dedo de aceite de oliva, hasta que se pongan tiernas. Majamos en el mortero 3 o 4 dientes de ajo con una cucharada de orégano, y lo añadimos al sofrito de verduritas.

  Sacamos un cucharón de frijoles ya cocidos, y los majamos también en el mortero, hasta hacer una pasta, y lo incorporamos a las verduras, y removemos.

  Sacamos las verduras de la cocción (y las desechamos), y añadimos a la olla el sofrito de cebolla, pimientos, ajo y orégano. Removemos bien, y echamos un chorrito de vinagre. Dejamos hervir 5 minutos para mezclar los sabores, salamos............. Y listo.

  Una cosa que me gusta de este plato es que no tiene apenas grasa, sólo el aceite que le ponemos. Unas legumbres con verduritas, y complementadas con arroz ( muy parecido al moros y cristianos), se convierte en un plato completo y equilibrado, aprovechándonos de las proteínas y los hidratos de las legumbres y el arroz.