Esta receta surgió buscando opciones de aprovechamiento para restos de pollo cocido, asado o incluso plancha, que fueran diferentes a lo que ya estaba haciendo.
De hecho, cuando hago caldo de verduras casero, suelo añadirle media pechuga de pollo o un par de muslos, y una vez que he terminado, utilizo estos restos de pollo, que están demasiado cocidos y no tienen mucho sabor, para hacer esta receta.
Solemos utilizar esta "picada" como una especie de "boloñesa" mezclada con pasta o bien con patatas asadas (le llamamos a esta receta "boloñesa barbacoa" aunque realmente no tienen nada que ver …). También he rellenado empanadillas con esta farsa, y quedan buenísimas.
Los ingredientes:
- Restos de pollo asado, cocido o plancha, que picaremos muy bien a mano, o incluso en la picadora.
- Cebolla (la cantidad depende de la cantidad del resto de ingredientes, en mi caso, para media pechuga de pollo uso una cebolla mediana)
- Salsa barbacoa, al gusto.
- Aceite de oliva, sal y pimienta.
La preparación:
Como ya he comentado, picamos los restos de pollo que tengamos. Quizás se pueda hacer perfectamente con otro tipo de carnes, pero no lo he hecho nunca.
A veces, cuando hago filetes de pollo a la plancha, hago de más, para que sobren y hacer esta receta.
Picamos la cebolla y la sofreímos en una o dos cucharadas de aceite de oliva, a fuego medio, para que se poche y se ablande sin que se queme.
Como lleva pocos ingredientes, si echamos buena cantidad de cebolla, queda más gustosa.
Una vez está la cebolla blanda, añadimos el pollo picado, salpimentamos y mezclamos bien. En este punto, a veces echo un chorrito de caldo de verduras o de agua, para cueza un poco y se mezcle bien la cebolla con la carne.
Añadimos salsa barbacoa, al gusto, y dependiendo de la cantidad de carne que tengamos, hasta conseguir una mezcla espesa.
Ya está lista para usar, y a disfrutarla...
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